lunes, 27 de septiembre de 2010

LA HUELGA GENERAL DEL 29S...¡QUE NO TRABAJE NI DIOS!


Esta semana, el día 29, hay convocada por parte de las Organizaciones Sindicales (CCOO y UGT mayoritariamente) una huelga general. Como todos sabemos, una huelga general se convoca para que no trabaje ni dios. En nuestro caso como está ya de baja, no creo que se sienta obligado a participar. Pero haría bien al menos en posicionarse. Aquí abajo, en la tierra ibérica, la cosa anda revuelta con el asunto. Hay opiniones para todos los gustos, incluso en la venerable institución eclesial, es decir en la mundana delegación patria del excelso poder divino. El presidente del consejo de gobierno (se supone que dios mismo) no ha dado instrucciones concretas a sus ministros, que andan huérfanos de una opinión sobre el asunto. Al parecer no saben como nosotros, que está de baja y que no va a decir ni pío. ¡Eso es información privilegiada!
Los únicos que se han atrevido a decir algo sobre el asunto, que tiene su enjundia, han sido a nivel mediático la Delegación de Pastoral Obrera de la Archidiócesis de Sevilla y el Consejo de Laicos del Arzobispado de Madrid. Estas agrupaciones dentro de la Iglesia (y supongo que otras más) si deben tener contacto con alguna emisión hertziana celestial, (no debe ser la COPE por cierto) y han adoptado una posición favorable al respecto. La jerarquía, como siempre, se sale por la tangente y elude adoptar una posición, ó mejor dicho, adoptan no apoyar la convocatoria de huelga. Porque entonces… ¿qué puñetas pasaría con la empresa? ¿Todos a la huelga? ¡De eso ni hablar! ¡Aquí todo dios a trabajar! Ni a EL lo dejan faltar el miércoles. No en vano la iglesia y su entramado empresarial cuentan con una nutrida legión de obreros y obreras que siguen con marcial diligencia los principios de monseñor Escrivá. ¡Al trabajo con alegría! y ¡Al despido con más alegría si cabe!
La delegación de pastoral obrera de Sevilla y el consejo de laicos si tienen, como decíamos, una fundada opinión al respecto y dicen cosas como:
"es la mayor agresión que han sufrido los derechos de los trabajadores en nuestra historia reciente". "la (reforma laboral) actual va más lejos, ampliando las causas del despido, que será más barato, limitando los derechos de los convenios y facilitando el deterioro del empleo público mediante facilidades en el despido y en la subcontratación mediante empresas de trabajo temporal". "Rechazamos la reforma laboral. Apoyamos la convocatoria de huelga general, como una medida justa y legítima para la defensa de los derechos y la dignidad de los trabajadores". "Pensamos que la solución de los problemas no pasa en absoluto por el tipo de medidas que se están adoptando, sino por buscar caminos para que el modelo de producción y consumo que predomine en nuestra sociedad no sea el que es hoy, sino otro, que permita vivir y cultivar la vida personal, familiar, cultural, social y religiosa". La Delegación de la Archidiócesis se muestra convencida de que "no saldremos de la crisis con justicia y humanidad si no rectificamos el rumbo". "La convocatoria de huelga general para finales de septiembre es una ocasión para denunciar a los que se apropian de lo que no es suyo y mostrar el amor de Dios a los que han sido y están siendo empobrecidos", termina el texto.
El consejo de Laicos de Madrid (*) clama por una regeneración democrática para que "los gobernantes coloquen en el centro de sus actividades y reivindicaciones a las personas, especialmente a los más empobrecidos, los hagan protagonistas de sus acciones y rompan el pragmatismo imperante". "No saldremos de la crisis económica con justicia y humanidad si no rectificamos el rumbo y nos empeñamos en volver al mismo camino que seguíamos antes de la crisis".
Rouco prefiere en línea con la Gran empresa, la banca y demás venerables instituciones no apoyar la huelga. Lo extraño sería que hubiera ido a una manifestación mezclado entre la plebe y más extraño que hubiera cogido la pancarta.
Desde aquí no cabe duda que el amplio equipo de redacción del blog decidimos apoyar la convocatoria, porque a los que tenemos hijos nos repele lo que se ha publicado en el BOE bajo el triste título de reforma laboral. Compartimos 100% lo dicho por las organizaciones OUTSIDERS de la iglesia y además nos avergüenza que no sepamos conservar por lo que otros tanto lucharon. Como consecuencia nosotros mismos y nuestros hijos vivirán en una sociedad como la que defienden la socialdemocracia cristiana, ZP, Rajoy, Rouco, Botín, la comisión europea, Florentino, Ronaldo y su tableta de chocolate suizo, Belén Esteban, el susum corda y la rehala que los acompañan.
Y tú dios, ¡Quién sabe ande andas metío! ¡Que lo busque Paco Lobatón! ¡¡Que estás de baja y no desaparecido!!


(*) Por cierto ¿laicos? ¿En la organización eclesial? A lo mejor por eso se han salido del redil del resto del rebaño. Que se anden con ojo)


- Página web de la Archidiócesis de Sevilla (www.archisevilla.org )

domingo, 19 de septiembre de 2010

Aquí el Universo...¿Y dios?

El vaticano no gana para sustos. Que si en Bélgica los prelados, presbíteros y clérigos han estado liándola parda durante un buen puñado de años, metiendo mano a los tiernos infantes que caían en sus santas manazas.
Que si Stephen Hawking anda metiendo el dedo en el ojo del negocio insistiendo en que dios estaba ya de baja cuando empezó esto del universo, casi ná…¡vaya! Casi ná, ha dicho el mozo. ¿Por qué no nos dejarán apacentar a nuestro rebaño en paz? Gritaban como posesos por los pasillos vaticanos los augustos cardenales en honorables calzas, según fuentes fidedignas. Y es que llevan santa razón en su queja los prelados. ¿Es que no los pueden dejar tranquilos por una temporadita? Al parecer los niños que sufrieron abusos en Bélgica no paran de quejarse los muy malditos, dicen que eso es algo que no se olvida y que los responsables merecen castigo terrenal. En el vaticano han refunfuñado e impondrán una reprimenda a los que cometieron tales felonías, como hicieron con Marcial Maciel, alias el “legionario de Cristo”, imponiéndoles un paciente retiro de la vista pública. Todos contritos, contritos. Pucheros, ojitos gachos, manitas cruzadas, contrición, arrepentimiento y todo ello aliñado de unos sonoros golpes de pecho con rezo de Padrenuestros y rosarios ¡Y pelillos a la mar! ¡Que una mala tarde la tiene cualquiera!
Pero no salen de un susto y llega otra vez la ciencia, esa maldita impía (según rechinan entre dientes algunos reverendos) y vuelve a soltarles un flagelazo en plenas fauces. ¡Ayyyyyyy! ¡Qué ese si duele pater!...¿Pero porqué no meten ojo en sus microscopios, telescopios, átomos, cuerdas, universos y nos dejan en paz con nuestra empresa?, han argumentado varias diócesis y varias prelaturas personales de su augusta santidad. ¡Estos terminarán por cepillarse el invento! ¡Verás tú!, gritaba un prelado por los pasillos vaticanos el pasado viernes 3 de septiembre.
Y es que Stephen Hawking, otrora defensor de la existencia de una mano creadora (Breve historia del tiempo, 1988), ahora se desdice y viene a afirmar junto con el físico y matemático estadounidense Leonard Mlodinow en su libro “The Grand Design” que la moderna ciencia no deja lugar a la existencia de un Dios creador del Universo. Todo es consecuencia de leyes físicas y que se está próximo a una teoría unificada que explique todos los fenómenos que configuran el universo ó multiverso como también afirman.
Y es que dios, al dictar el génesis bíblico al manuscritador, se olvidó de dar más detalles sobre como forjó el universo, para que fueran garabateados sobre los papiros. ¡Vaya olvido pardiez! ¿Y el rebaño de otros mundos, incluso de otras realidades paralelas? ¿Serán también depositarios de la buena nueva? ¿Depositarán sus contribuciones dominicales en cepillos santorales? Y la institución terrenal si saberlo…¡A lo mejor pueden venir vocaciones de otros mundos! ¡Venga excursiones para ver reliquias allende los cielos! ¡Que incógnitas tan terribles nos asolan en éstos momentos tan críticos para la economía, puñetas!
La egregia institución ha salido rápido a dar su (como siempre) fundada opinión sobre el caso. El argumentario esgrimido por la curia procede de la boca del arzobispo de Oviedo y rebate a Stephen Hawking afirmando que "existe Dios y la vida lo sabe". ¡Hermosos efluvios doctrinales penetran en mis sanginolentos fluidos! ¡Divina providencia la que nos hace disfrutar de tan consistentes argumentos! ¡Qué haríamos en el rebaño de dios sin éste alimento espiritual!
El arzobispo continúa argumentando: “no creer en Dios o afirmar que no existe, cuesta creerlo."
Digo yo que para creerlo sin que nos cueste nada podría la vida mostrarnos una prueba consistente, ya que ella parece saberlo, como así lo afirma seguro el arzobispo. ¿Conoce usted a la vida, Sr. Arzobispo? ¿Me la presenta por favor? ¡Ah! ¿Que no ha podido venir hoy?…bueno no se preocupe, lo entiendo.
Prosigue el vocal de la curia : "Basta tener las antenas bien puestas y la cobertura suficiente para entender que Dios está, emite, tiene algo que decirnos, mucho en lo que acompañarnos, y con su acostumbrada discreción él está presente".
Para algunos está claro que vivimos en zona sin cobertura, porque a nuestras antenas móviles no llega señal. Será, a lo mejor, porque el altísimo es ¡tan discreto! ¡Tan discreto que no parece que esté! Claro es tan discreto…Sr. Arzobispo ¿deberíamos llevar las antenas empalmadas en las orejas, para tener más cobertura? ¿Con brida plástica ó con cinta americana? ¿Nos las implantamos con cirugía teologal? Alúmbrenos nuestro pobre camino, usted que cuenta con potentes faros en su purpurada carrocería.
"Es el creador del Universo, desde hace mucho tiempo", apuntilló el arzobispo de Oviedo. "Hawking, como cualquier paisano, puede decir la suya —su verdad—, y él la dice, pero tiene que comprender que también otros la pensamos distinta, y además podemos argumentarla", concluyó Sanz Montes.
Lástima que la ciencia trabaje con datos demostrables y con las diabólicas leyes físicas que permiten su comprobación. ¡Obra satánica donde las halla! Si es que ya lo dice el libro sagrado ¡No comerás del árbol del conocimiento! Normalmente las leyes físicas distan mucho de ser opiniones, pero aún así intentaremos desde éste humilde blog intentar pedir explicaciones a mr. Hawking sobre si las leyes opinan hoy otra cosa que ayer, a lo mejor nos llevamos una sorpresa. ¡Qué caramba!
Dios…a que observando el panorama ¡Tú lo que no quieres es pedir el alta!...¡Así va éste país! Ni dios quiere apencar, to er mundo de baja. (Vociferan con la cara henchida en sangre los social-demócratas cristianos modernos ¡Aquí no se pone de baja ni dios! ¡Panda vagos!).

P.D. La semana que viene ¡LA HUELGA GENERAL!

miércoles, 8 de septiembre de 2010

¿DIOS ES UNA OPCIÓN?


Son las 1:43 h del 8 de Septiembre de 2010. Mañana volveré otra vez a la oficina. No quiero llamarlo trabajo porque no lo siento como tal. Mi "alma" campa por otros parajes. Y en éste preciso instante, es cuando me martillea la cabeza una idea que tenía que volcar en letras, no había más remedio. Cada vez que dejo escrita una entrada en el Blog “Dios de Baja” no dejo de preguntarme en qué medida influyo en alguien para que deje de creer en Dios. Deseo que sea en las menos posibles. ¿Sorprendid@s? Me explicaré.
Siempre me ha asombrado la necesidad del ser humano de creer en Dios. No existe ninguna evidencia física ó no física de la existencia de ese ser tal y como nos lo definen en cualquier sagrada escritura. Nada ni nadie puede afirmar que lo ha visto, le ha estrechado la mano ó ha departido con él mientras bebían café ó un whiskey “on the rocks”. Ni siquiera que lo hayan visto levitando con las crines al viento sobre una nube rodeado de angelotes regordetes.
No hay evidencias de ningún tipo y sin embargo muchas personas necesitan de su existencia. ¿Porqué? Después de mucho reflexionar sobre ello, llego a la conclusión de que si Dios no existiera alguien lo habría inventado, de hecho (de alguna manera) así ha sido.
¿Qué sería de la vida sin la magia? ¿Qué sería de la vida sin la esperanza ó sin la ilusión en que alguien aplicara verdadera justicia? No voy a ser precisamente yo quién quite esa ilusión. Nunca me lo perdonaría.
Llevo tiempo reflexionando sobre ello y creo que Dios representa la última frontera mágica que le queda al ser humano, lo único que resta para que caigan las barreras y la razón se alce victoriosa sobre los rescoldos de lo que fue un titán de los cielos. Ahora me pregunto…¿Qué pensaría un griego del siglo I, ó un romano cuando observó a su ristra de dioses cayendo de los pedestales para dar paso a un solo dios? ¿Fue el fin del mundo? No. Resultó un nuevo mundo.
Ahora está naciendo otro mundo. En éste nuevo mundo, Dios es una opción. Una opción que nace de la reflexión sincera ante la evidencia de que nunca va a venir para echarte una mano, ni nada parecido. Es evidente que nada invita a creer en su existencia, pero sin embargo opto por creer, digamos que es una necesidad vital, un refugio interior que necesito como contrapeso ante las adversidades del mundo real. Por supuesto no con los atributos con que lo revisten las religiones.
Y entonces…¿Porqué carajo hago yo (Dios de baja) todo esto? Pues porque no puedo concebir un dios tan mezquino como lo pintan las religiones. No deseo consentir el engaño. Ha llegado el momento de superar esa visión simplista de Dios y creo que también a las religiones. No son necesarias y representan más obstáculos que ventajas en la evolución del ser humano. Representan un mensaje obsoleto, casi ridículo y trasnochado de respuesta ante una necesidad humana. Tuvieron su lugar, tuvieron su oportunidad y la naturaleza los ha seleccionado para la extinción. Quedarán como una reliquia entre las muchas que muestran los museos. Continuarán existiendo como corporaciones empresariales, porque tienen mucho poder económico y manejan cantidades importantes de dinero. Pero carecen de sentido espiritual y el mundo dará un paso de gigante cuando se libere de ellas. ¿Cómo será la transición? Será pacífica y sin pausa, sin rencor, sin frustaciones. Van a languidecer, como así se está demostrando en los templos vacíos y en las iglesias sin uso ahora dedicadas a usos culturales. Monasterios que se venden para hoteles de lujo y los otrora nutridos seminarios y residencias, ahora vendidos para colegios privados. Puede que si el problema del trabajo precario persiste, aumenten algo las nuevas vocaciones pero es un descenso lento hacia el fin.
El mayor problema lo tienen las propias religiones en su interior. Sus estructuras de poder van a exigir un alto precio y se desintegrarán atacando todo cuanto esté a su alcance.
Tienen los días contados y por mucho que intenten dar una apariencia de lo contrario, saben muy bien que todo está próximo a finalizar, simplemente porque han dejado de ser útiles a la humanidad. Es el principio de selección natural (que tanto les divierte). Pero Dios no tendrá su fin en éste paso. Se despojará de la hojarasca que lo ha acompañado durante siglos y pervivirá, porque es un necesidad interior de las personas.
Por eso el dios que sigue y seguirá de baja sine díe es el religioso y por mucho que quiera no se le va a dar el alta. El médico que lo lleva no lo deja. Que así sea, Amén.